Protege los contornos y el cuero cabelludo, evitando la formación de manchas producidas por los diferentes procesos de coloración, sin alterar el tono ni la duración del color. Reduce al máximo las posibles irritaciones. Mejora la textura del cabello y facilita el aclarado final.
También se puede emplear añadiendo en la mezcla de la coloración aportando sus propiedades protectoras sin alterar el proceso de coloración.